Javi Muñoz y Stoichkov se saludan tras marcar el delantero. /
Como bien dijo Gaizka Garitano antes de cerrar con sendos triunfos el ciclo de dos partidos consecutivos que han abierto la segunda y definitiva vuelta, al Eibar le gusta comandar la clasificación, aunque tenga que padecer una agonía para defender su plaza. Y es precisamente esa capacidad de sufrimiento la que le llevó a no resignarse a permiti
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